¿Qué es Ásatrú?

MANIFIESTO POR LA 

INTEGRIDAD

 RELIGIOSA DE LOS CULTOS

 PAGANOS

Desde hace un tiempo venimos observando que existen una serie de personas que se autoproclaman como Sacerdotisas Wicca, Druidas, Sumas Sacerdotisas, Gythia (Gyðja) y Gothi Goði (goðar), “máximos representantes de….” Y que no hacen más que corromper unas creencias religiosas establecidas y firmes, aprovechando el tirón místico que tienen para vender sus servicios de tarot y magias telefónicas.

Todos sabemos que algunas religiones como Wicca y Druidismo están de moda, y ser Druida o Sacerdotisa viste mucho el nivel curricular, por lo que algo tan sagrado como estas religiones pasan a ser ninguneadas y utilizadas como reclamo del marketing más agresivo del mercado.

Así pues y ante la proliferación de este tipo de sujetos, la Asociación Religiosa Druida Fintan,Religión Wicca Celtibera, Comunidad Odinista de España y la Hermandad Druida Dun Ailline, a través de sus máximos responsables, están de acuerdo en que ha llegado el momento en que defendamos nuestras religiones y sus instituciones serias y comprometidas con el objetivo de evitar que personas sin conocimientos y con el único fin de lucrarse o de inflar su ego utilicen nuestras creencias rebajándolas, corrompiéndolas, desvalorizándolas y desvirtuando el sentido religioso, sagrado y ancestral de las mismas.

Ha llegado el momento de que defendamos unidos nuestras Tradiciones Religiosas.

¿QUE ES ASATRÚ?

Aunque para algunos es más que vidente, quizás para otros, sobre todo para los profanos a nuestra confesión, no lo sea tanto y siempre es bueno recordar muy claramente y de la forma más concreta posible, sin tecnicismos ni retorcidas alegorías, nuestro propósito y compromiso para con nuestro panteón y nuestra Fe.

Ásatrú enseña que el objetivo de vivir es disfrutar de una vida útil y valiosa. Los creyentes ásatrúares valoramos la libertad individual, limitada responsablemente. COE-Ásatrú es la cuarta confesión religiosa ásatrúar reconocida por un Estado soberano y la primera fuera de Escandinavia.

Ásatrú es una confesión politeísta, por lo tanto reconocemos como iguales y propios los dioses y diosas del panteón germánico. Somos herederos de los antiguos visigodos que vivieron en la Península Ibérica y responsables de su memoria histórica y nuestros antepasados. Nos mantenemos fieles a nuestra tradición, ceremoniales, raíces y los vínculos con el entorno natural.

Nuestras comunidades (kindreds) se rigen por las nueve nobles virtudes, que son nuestro código vital y que nos sustenta día a día.

1. Coraje
2. Verdad
3. Honor
4. Fidelidad
5. Disciplina
6. Hospitalidad
7. Productividad
8. Autocontrol
9. Perseverancia

Los ásatrúares, a diferencia de otras confesiones, no tenemos un culto dogmático, no nos interesa el proselitismo religioso y tampoco queremos justificar lo injustificable, poseedores de la verdad más absoluta. Sólo practicamos una religión europea, muy antigua, que existió antes de la aparición del cristianismo. Simplemente, nos hace sentir bien y entender mejor nuestra existencia.

Nuestra religión es una religión para esta vida, no buscamos fugas mentales ni paraísos ajenos a la realidad.

Nuestra religión aspira volver a ser una religión recreadora de valores y portadora de la regeneración necesaria para nuestros pueblos.

Nuestra religión no se arrodilla ante nuestros dioses y diosas, son nuestros hermanos mayores, entes superiores pero no alejados ni indiferentes de lo humano ni del mundo; son nuestros guías y compañeros en el humano caminar. No somos algo opuesto ni extraño a ellos, pues dependen de nosotros y nosotros de ellos.

Nuestra religión es un estilo de vida, no solamente un entramado de creencias y mitologías.

Nuestra religión afirma que el mundo, los dioses y diosas y los hombres están creados del mismo modo, forman parte de las mismas esencias.

Nuestra religión defiende su propia identidad, y se opone al universalismo. El respeto de “lo diferente” es norma dentro de nuestra fe religiosa, para lograr entender y respetar las desiguales manifestaciones que caben en un mundo diverso.
Nuestra religión mantiene una total independencia de cualquier ideología política de partido.

Nuestra religión afirma que el espíritu es inmortal y nuestros difuntos siguen acompañándonos. La muerte es parte intrínseca de la misma vida, no algo diferente o ajeno a ella, un estado temporal que no es el fin sino el comienzo de algo nuevo.